GENERALIDADES
Es la infección más frecuente en el ser
humano y se produce cuando la acción bacteriana de microorganismos propios de
la cavidad oral (Streptococcus mutans)
daña la pieza dentaria.
- La presencia de azúcar luego de ingerir alimentos
y bebidas dulces favorece el metabolismo ácido bacteriano y el consecuente daño
dentario.
- Tras el consumo de sustancias azucaradas, el
nivel ácido de la cavidad oral puede demorar hasta 40 minutos en retornar a su
valor normal.
- La adquisición de caries en forma precoz en
la infancia puede alterar la dentición definitiva, la dicción y la nutrición de
los niños.
SÍNTOMAS
Inicialmente, aparece un cambio de
coloración de la superficie del diente, que se vuelve amarronado y luego negro.
Si el proceso no se detiene, el ácido puede
carcomer el diente, que, al igual que la encía, se vuelve doloroso.
En ausencia de tratamiento, la caries puede evolucionar
a un adenoflemón y progresar, incluso, hasta comprometer el hueso maxilar.
La
presencia de caries puede originar infecciones graves en los pacientes con
enfermedades de base, como las personas con cardiopatías con riesgo aumentado
de endocarditis o los inmunocomprometidos que presentan un mayor riesgo de adquirir
bacteriemias.
CONTAGIO
Y TIEMPO DE EXCLUSIÓN
Las caries se transmiten al compartir
objetos que tienen contacto con la boca como parte de actos rutinarios:
- “Limpiar” el chupete con la boca de la madre
antes de dárselo al bebé.
- Probar alimentos con el mismo cubierto que
se utiliza para alimentar al niño.
- Compartir cepillos de dientes.
El
niño con caries no debe ser excluido del jardín o la escuela.
PREVENCIÓN
En cuanto a la alimentación, se recomienda:
- Reducir la ingesta de alimentos y bebidas
que contienen azúcar.
- Evitar que el niño se duerma mientras toma
la mamadera con leche.
En cuanto a la higiene bucal, se recomienda:
- Supervisar el lavado de dientes de los niños
menores de seis años.
- Cepillar los dientes al menos dos veces por
día: después de desayunar y antes de dormir.
- Limpiar dientes y encías luego de la ingesta
de dulces. Reforzar el esmalte dental con flúor.
- Limpiar con una gasa húmeda la boca, las encías
y los labios y carrillos de los lactantes al terminar de comer. No es necesario
utilizar pasta dental.
Todo niño debe realizar un
control odontológico en su primera infancia y luego repetirlo de manera regular
durante toda la vida.
Los adultos que conviven con niños deben mantener
buenas prácticas de salud odontológica, para evitar la diseminación de las
bacterias que causan caries.
PARA
RECORDAR
- Las caries adquiridas en forma precoz durante
la infancia pueden alterar la dentición definitiva, la dicción y la nutrición
de los niños.
- Es importante reducir la cantidad de
alimentos y bebidas con azúcar que éstos ingieren.
- Los adultos que conviven con niños deben
mantener buenas prácticas de salud odontológica.
- La presencia de caries puede originar
infecciones graves en los pacientes con enfermedades de base.
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